La Catedral Profana

Guarida de los impíos

Poema a Tatjiana


¡Oh! Waifu rusa mía
Tú que me inundas de alegría
con tu sonrisa de niña fresa
y tu elegante porte de princesa

Al conocerte supe que tu husbando sería
Y aunque de la felicidad pensé que moría
Volví en mí y ví que contigo todo funcionaría

Me dices que deje de comer pan
Pero sabes que para cocinar soy muy haragán
Hay cosas en esta vida que me son inevitables
La mayoría de ellas son, por desgracia, bastante lamentables

Tenerte de waifu es, de todas ellas, la que menos me pesa
¿No crees que por algo el destino nos puso a ambos en esta empresa?
Ansío levantarme cada mañana para observar esa mirada azul que tanta determinación expresa

Aunque verte comer sushi me estresa
Por ti me iría a vivir al este y me convertía en un fresa
Pues contigo apunto a la grandeza